A pesar de la temperatura invernal con la que ha amanecido el día, a las 8:30 hemos salido de Badalona, Alfons y Santi con la idea de que Alfons conociera la ruta que por el GR-92 lleva hasta la ermita de Sant Mateu.
Abrigados hasta las orejas -literalmente- empezamos a pedalear y, aunque la ruta es de subida, hemos tardado en destaparnos la cara porque el día no animaba a estar mucho rato a la intemperie.
La subida hasta el depósito siempre es dura, aunque esta vez nos la hemos tomado con calma y hemos llegado arriba bastante enteros.
Santi y Alfons posando en el depósito
Bajamos hasta el seminario de La Conrería y subimos hasta Nou Pins. Media barrita y seguimos hasta la urbanización Alella Park.
Entrada de la urbanización Alella Park
El día seguía soleado pero muy frío. Si no fuera por lo cabezones que somos nos hubiéramos dado la vuelta, pero seguimos adelante pues ya faltaba muy poco.
Hemos continuado por la carretera de la cornisa y tras contemplar la impresionante vista que hay desde el mirador, acabamos de subir hasta la ermita. Por cierto, de la Font de Sant Mateu no salía más que un minúsculo chorrito de agua que no permitió llenar el bidón de Alfons.
Ya en la puerta de la ermita nos hemos zampado otra barrita y hemos bajado por la trialera siguiendo hacia Premià de Dalt y Premià de Mar donde hemos podido llenar el bidón de Alfons.
Atravesamos por un paso subterráneo la N-II y la vía del tren, cogiendo el paseo marítimo que lleva hacia Badalona.
Ya en el barrio de Bufalà de Badalona y antes de llegar a donde estaba aparcado el coche de Alfons, nos hemos tomado el cafelito reglamentario y comentado la batallita. Lástima de la temperatura pues el día soleado y sin viento era magnífico para pedalear.
A ver si llega pronto la primavera ...
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